Hasta hace poco, sólo nos guiábamos por dos criterios a la hora de elegir un alojamiento para las vacaciones: el precio y la ubicación. Por supuesto, siguen siendo importantes (después de todo, la pandemia también ha afectado a los ingresos de los turistas). Pero el precio de la habitación y la ubicación del hotel ya no son factores determinantes. Una reciente encuesta realizada por Skyscanner entre 2,300 viajeros de todo el mundo muestra que la sanidad y la distancia social son ahora más importantes que cualquier otra cosa y, es comprensible.
Estos son algunos de los resultados de la encuesta:
- Cerca de la mitad de los encuestados evitaría compartir los baños y otras zonas públicas de los hoteles.
- A dos de cada cinco viajeros les gustaría cenar al aire libre.
- Tres de cada cuatro viajeros creen que la higiene y el saneamiento se han vuelto mucho más importantes que antes.
- Un 30% dijo que los programas de fidelización son ahora mucho menos importantes.
Son cambios importantes. Por lo que, si se aborda correctamente, los hoteleros y propietarios de alojamientos vacacionales tienen todas las posibilidades de reinventar todo el proceso de alojamiento en hoteles y ofrecer a los huéspedes una experiencia completamente nueva.
Los procedimientos de check-in de los hoteles cambiarán
Mientras más hoteles de todo el mundo se preparan para dar la bienvenida a los huéspedes, está claro que todo el proceso de alojamiento de los hoteles debe modificarse de cara a la pandemia.
Más flexibilidad en las condiciones de reserva de alojamiento
Las condiciones pueden variar de un hotel a otro, pero en general la mayoría de los hoteles de todo el mundo permiten la cancelación o el cambio gratuito de una reserva hasta 24 horas antes de la fecha de entrada prevista. Se aplica tanto a las reservas existentes como a las nuevas. Algunas cadenas hoteleras, como Intercontinental, por ejemplo, ofrecen la opción Reserve ahora y pague después sin necesidad de hacer ningún depósito.
Registro de entrada y salida sin documentos y pago sin contacto
Para evitar el contacto presencial innecesario, la mayoría de los hoteles están ampliando su oferta de servicios digitales. Otros, como el Grupo Hilton, ofrecen el registro de entrada y salida sin contacto con una llave digital. Algunos, como Hyatt y Marriott, están convirtiendo sus aplicaciones móviles en una recepción virtual. En este tipo de hoteles todo se puede hacer a través de la app: registrarse en la habitación y pedir el servicio de habitaciones, entre otras cosas. En este sentido, los pagos sin contacto, que antes de la pandemia eran bastante habituales, es probable que se conviertan en el principal método de pago.
Respete las normas de distanciamiento social desde su llegada al hotel: habrá marcas claras para que los huéspedes puedan mantener una distancia segura entre sí. En algunos hoteles se registra a los huéspedes antes del check-in real para evitar aglomeraciones en el vestíbulo. Algunos ponen separadores en el camino a la recepción como precaución adicional. Además, en el vestíbulo y en las plantas habrá máquinas con desinfectantes para las manos, el ascensor tendrá que seguir las nuevas normas y el personal del hotel llevará mascarillas. En los hoteles Shangri-La y en algunos otros hoteles también hay alfombras desinfectantes y mascarillas para los huéspedes.
Desinfección e higiene de las habitaciones en los hoteles
Ahora la limpieza en los hoteles se controla cuidadosamente: muchas habitaciones tienen mesas con un calendario de limpiezas recientes y programadas. Las grandes cadenas hoteleras están creando asociaciones con centros médicos. Por ejemplo, Hilton se alía con RB, que produce los productos desinfectantes Lysol y Dettol, y con un centro médico privado de investigación, la Clínica Mayo. Y expertos del programa médico de Johns Hopkins Medicine International asesoran al Four Seasons en cuestiones de salud y seguridad.
De forma general, los hoteles prestan mucha atención a la introducción de nuevos enfoques en materia de limpieza y explican claramente por qué son necesarios. Realizan inspecciones de pasillos y habitaciones con focos de luz negra y filtros electrostáticos (al igual que los ionizadores de plasma para limpiar el aire desinfectan las cabinas de los aviones antes de un vuelo) para asegurarse de que todo esté en orden. Ahora, además, las habitaciones se dejan vacías durante unas horas más entre los huéspedes, para que tengan tiempo de ventilarse bien.
Por último, se acabaron los días en que los artículos de aseo más codiciados en los hoteles eran los botes de shampoo y acondicionador de lujo. En la actualidad, los kits de baño de muchos hoteles de lujo, como el Four Seasons, incorporan mascarillas, desinfectantes para las manos y toallitas desinfectantes. En otros hoteles se eliminan los objetos que los huéspedes tocan a menudo y que son difíciles de limpiar (como las compresas, las almohadas decorativas, las carpetas de los huéspedes e incluso los minibares), además de algunos muebles.
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